miércoles, 11 de noviembre de 2020

REYES Y REVOLUCIONARIOS INFANTILES

 


Comencemos por el principio pre-histórico. Desde que la Humanidad comenzó a crecer ha habido “reyes”, y esto está en la psicología profunda de cada individuo. Al ser humano por naturaleza le ha parecido mejor que “alguien mande”, que “alguien dirija”, y él más bien obedece.

En el proceso histórico algunos individuos han pensado por sí mismos llegando a la conclusión de que es posible un auto-gobierno personal en vez de reyes, pero esta idea ha sido mucho más reciente que la primera. Una de las características psicológicas de esta última idea es el afán infantil de liberarse de la noche a la mañana de un hábito de milenios. Por esta razón, y desde este punto de vista, se percibe que las libertades individuales se están perdiendo, cuando en realidad, no se han ganado todavía. Sin embargo, se ha avanzado.

El cambio no llega de la noche a la mañana. El supuesto retroceso de libertades individuales y cooperación colectiva, junto a un reavivamiento de la derecha, no es tal. Es una percepción invertida desde una minoría privilegiada que creía ganada la contienda para las mayorías. Típica apreciación de la izquierda ingenua.

La evolución continua a pesar de reyes e infantiles revolucionarios. Ni la derecha durará para siempre, ni la izquierda logrará sus metas en pocas generaciones.

Es cruel, pero aún podemos reírnos, no del otro, lo cual “revictimiza”, sino de uno mismo.

Para terminar un chiste clásico: “Sigamos teniendo paciencia”.